domingo, 15 de diciembre de 2019

Folleto 190

Final de año



Nos acercamos al final del año y más que  repasar el libro de contabilidad para acusarnos de conductas que no deberíamos haber hecho y castigarnos por ello, al fin y al cabo hicimos lo que pudimos con las herramientas que teníamos,  sería preferible mirar para adelante y procurar soltar algunas actitudes negativas y adquirir otras  que nos pueden ayudar a disfrutar un poco más de la vida y que fortalezcan nuestra existencia en este mundo tan complejo.

Cómo conseguir un estado de ánimo un poco más amargado:
  • No salir de casa nunca o muy poco.
  • Movernos lo menos posible, no pasear, no explorar sitios desconocidos.
  • Gastar un poco más de dinero de lo que ganamos.
  • Tomar la vida y a nosotros mismos demasiado en serio, con poco sentido del humor.
  • Fijarnos continuamente en por qué las cosas no funcionan, insistir frecuentemente en lo negativo de las situaciones, quejarnos por todo.
  • Ser pasivo: siempre recibir y nunca contribuir, no ayudar a llevar las cargas de los demás, no servir. 
  • Criticar ácidamente a las personas que han tenido suerte o han sobresalido en algo.
  • No dar el primer paso en felicitar o acercarnos a alguien
  • Mirar hacia atrás y acusarnos inflexiblemente por lo que hicimos o dejamos de hacer, castigarnos por el pasado y por el presente.
  • Compararnos negativamente con los demás


Como conseguir un estado de ánimo un poco menos amargado
  • Salir de casa frecuentemente
  • Movernos: caminar, bailar, cualquier ejercicio físico
  • Gastar un poco menos de lo que ganamos.
  • Preocuparnos menos por los problemas propios, de la política, nuestro equipo de futbol o la vida en general.
  • Contribuir en algo, ser servicial.
  • Buscar aprender algo de los afortunado y personas con éxito
  • Ser los primeros en acercarnos, en decir hola, en felicitar.
  • Convencernos de que estamos exactamente donde teníamos que estar. 
  • Somos únicos, no compararnos con otros.

La lista podría  ser mucho más extensa pero con unos pocos motivos es suficiente.

Feliz Navidad y que el próximo año escalemos un poco más el monte Carmelo, donde habitan las personas contentas. Felicidades.



NOTA.  Apuntes sacados de James Clear y James Martin.

viernes, 6 de diciembre de 2019

Folleto 189

Autocontrol (IV). Fiestas de Navidad



Comienza una época especial del año: las fiestas de Navidad. Pero lo que para algunos son días de alegría y disfrute, para otros son, sin embargo, tiempos de melancolía, depresión y estrés.  Y si usted es una de esas personas a la que no le agradan estas fiestas, no crea que está solo; para cientos de personas es una cuesta arriba que solo termina en Enero cuando todo ha finalizado.

De pronto, las calles están llenas de luces con mensajes de felicidad y próspero año nuevo... Cuando a estas personas lo que verdaderamente les apetece es que la dejen en paz y no les martilleen con tanto anucio vacío y aburrido.  Para algunas personas, tanto jolgorio externo es contraproducente y lo único que consigue es aumentar su soledad y autoconvencerse de que no les gusta este mundo.

viernes, 22 de noviembre de 2019

Folleto 188

Autocontrol (III)



Nuestro desarrollo personal se cimenta sobre adquirir buenos hábitos, y los buenos hábitos se consiguen con la repetición de una conducta.

¿Cuantas veces tengo que repetir una buena conducta para que se haga habitual?
¿20 días? ¿30? ¿60?

La respuesta es: toda la vida.
Porque si dejas de hacerlo ya no es un hábito.
Lo que sí es cierto es que, cuanto más la prácticas, menos trabajo te costará efectuarlo.

Uno de los primeros buenos hábitos que debemos conseguir para dirigir nuestro bienestar es dejar de preocuparnos por todo aquello que no podemos controlar.

¿Qué significa eso?

lunes, 11 de noviembre de 2019

Folleto 187

Autocontrol (II)



Autocontrol es no permitir que se introduzcan en su casa los pensamientos, sentimientos y conductas, propias o ajenas, que le produzcan daño en su vida.

Y dejar que entren los pensamientos, sentimientos y conductas, propias o ajenas, que le hacen bien y le posibiliten una vida más plena. En definitiva controle el acceso, las fronteras, de los que quieren entrar en su casa.

domingo, 3 de noviembre de 2019

Folleto 186

Autocontrol (I)

 Consejos para controlar nuestros impulsos



Una de las causas de nuestro sufrimiento es la falta de habilidad para controlar nuestros impulsos, esa fuerza interior que nos empuja con una gran fuerza e intensidad para conseguir metas sin medir inteligentemente las consecuencias a largo plazo que tiene nuestros pensamientos, sentimientos y conductas. Es lo que denominamos autocontrol o más familiarmente fuerza de voluntad.

El autocontrol es la capacidad de elegir entre distintas respuestas inmediatas aquellas que son  las mejores a largo plazo, es lo que diferencia a los humanos del resto de seres vivos; el autocontrol nos permite planificar, elegir entre distintas alternativas y ante estímulos competitivos la respuesta que mejor nos garantizan la supervivencia y reproducción; el autocontrol evita las acciones cuyas consecuencias posteriores nos ocasionarán distintos tipos de problemas y dificultades. Es la vacuna contra los espejismos que nos prometen recompensas que luego no existen.

jueves, 17 de octubre de 2019

Folleto 185

¿Es usted maduro o inmaduro? 

¿Puede pasar la "prueba de la bombilla"?



Reproduzco en la entrada de hoy un artículo escrito por Gina Barreca Ph.D. en "Psycology Today" el 26 de marzo de 2019.
Espero que os guste.



¿Es usted lo suficientemente maduro para pasar la "prueba de bombilla"?

Durante más de dos años había estado compartiendo mis veintitantos con un hombre educado y cuerdo cuando comentó con su alegre acento británico lo asombrado que estaba de que, dado todo el tiempo que estuvimos en nuestro apartamento, no se había fundido ni una bombilla.

Levanté la vista de la pila de papeles que estaba calificando para volver a comprobar que no estaba bromeando. Realmente no bromeaba, lo decía en serio.

"¿Qué crees que pasó? ¿Hice un pacto y vendí mi alma al hada de la lámpara? Vivimos prácticamente en un sótano. Reemplazo las bombillas constantemente", le dije.

"Nunca te vi hacerlo", respondió. "Así que simplemente asumí que éramos muy afortunados".

Eso fue el final de esa relación y el comienzo de la prueba de la bombilla: llegué a la conclusión de que la inmadurez y la pereza están inextricablemente vinculadas, pero que ninguna de ellas es irrevocable.

sábado, 28 de septiembre de 2019

Folleto 184

Pereza y zona de confort



Cuando estamos instalados en la zona de confort, no importa cuántos videos motivacionales veamos, o cuántos libros de autoayuda leamos, generalmente nos motivan, como mucho, un rato. Posteriormente todo vuelve al punto de partida.

Somos perezosos y salir de nuestra zona de confort (estar  sentado   navegando en internet, jugando o viendo series de televisión) día y noche hace que pasemos  jornadas enteras sin hacer algo constructivo.

Hay una solución muy simple para esto.

Empiece realizando una actividad física. Tiene que levantarse ahora mismo de donde sea que esté sentado o acostado. No puedo enfatizar esto lo suficientemente. Problablemente, haya intentado ir al gimnasio y no funcionó. Posiblemente, sea porque personalmente no disfrutaba visitando el gimnasio, pero se esforzó de todas formas porque otros muchos le daban ejemplo. No haga eso ahora, no va a ser capaz y no le ayudará.

domingo, 8 de septiembre de 2019

Folleto 183

Desarme con humor a su ofensor



¿Quién no se ha encontrado con el típico gracioso que se mete frecuentemente con nosotros colocándonos una etiqueta que a él le origina un ataque de risa pero que a nosotros no nos hace ningún chiste?

"Hombre, Antonio, ¿qué comes que cada día estás más feo, o más gordo o eres más tonto?  ¿Estás embarazado o embarazada"

Y si tiene alrededor alguien que le sigue la corriente uniéndose a su burla, entonces nuestra incomodidad aumenta exponencialmente.

Bárbara Berchkhan tiene un práctico libro, Judo con palabras, donde examina el problema y ofrece una sencilla y fácil solución para enfrentarnos a estos aprendices de bufones sin gracia que tanto nos pueden molestar.

El humor es una de las herramientas más poderosas que tenemos los humanos, y el reírnos  de la gente maleducada, de los pedantes, de los arrogantes, de los tiranos, supone una satisfacción enorme; y una defensa que podemos ejercitar contra estos individuos desconsiderados, sin despeirnarnos, sin aparentemente contraatacar diciéndole que se meta los comentarios en las narices, sin enfadarnos con ellos y sin mostrar esfuerzo alguno. Sobre todo si ese maleducado aparece en las reuniones familiares y hay que mantener las formas para no originar un conflicto desagradable en la cena.

La técnica consiste en el refrán sin sentido.

domingo, 1 de septiembre de 2019

Folleto 182

La Ley del Embudo



La profunda necesidad de buscar seguridad en un mundo, a veces, muy hostil, nos conduce frecuentemente a comportamientos patéticos y egoistas, que vistos desde fuera, distanciadamente, nos hace ver las reacciones primarias, propia de niños malcriados por las que nos conducimos ante las dificultades que se presentan.

La Ley del Embudo (ancho para mi, estrecho para los demás) o como se denomina en psicología social con el pomposo nombre de “el error fundamental de atribución”, consiste en que, cuando otra persona comete un error o mala conducta, este se le atribuye a su carácter, actitud o mala educación, jamás a las circunstancias. Si alguien se salta un semáforo en rojo, se debe a que es un imprudente, un borracho o un antisocial. Su personalidad no es muy madura. En cambio, cuando nosotros cometemos un error o una mala conducta, es debido a las circunstancias, no a mi personalidad: yo me salto el semáforo en rojo porque tengo que llevar urgentemente a alguien al hospital o tengo una prisa tan grande para recoger a mis hijos del colegio que no puedo esperar a que el semáforo se ponga en verde. Mi personalidad es muy madura, no soy un antisocial.

La Ley del Embudo siempre disculpa mis errores, no es mi actitud, sino las circunstancias inexcusables las que me obligan a actuar de esa manera, en cambio, en los otros, es su mal carácter o estupidez los que les hacen actuar así.

domingo, 11 de agosto de 2019

Folleto 181

La travesía del desierto 


 
 
Todos tenemos en nuestro interior algo de Aquiles, Ulises, Buda, Jesús de Nazaret o Don Quijote. Igualmente de Juana de Arco, Marie Curie, Teresa de Calcuta... Todos tenemos un héroe en nuestro interior por muy poco importante que aparentemente pueda parecer nuestra vida, como intentaba enseñar James Joyce en su “Ulises”. Todo ser humano puede ser un héroe, aunque él no lo advierta, y son las diferentes circunstncias de la vida las que harán que este héroe sea más o menos famoso, más o menos conocido por las demás personas.

Y una de las características en el camino, en la vida de todo héroe es la travesía del desierto. Nadie se escapa porque es en el desierto donde el héroe toma forma, se fortalece, aprende paciencia y resistencia ante el cúmulo de adversidades que se le presentan y de las que no puede escapar.

El gran desafío al que se enfrentará cada héroe en su camino de la vida cuando tenga que atravesar su desierto, es la tentación y seducción de abandonar, de desmoralizase en la travesía porque cualquier esfuerzo parezca inútil y las dificultades aparenten ser tan enormes como obstáculos insuperables. Es la sensación de haberse caído en un pozo de arenas movedizas en el que los movimientos para escapar agravan la situación.

viernes, 2 de agosto de 2019

Folleto 180

Fronteras emociales (II)



Un examen sobre la humanidad y su historia nos revela que vivimos en un mundo con mucho sufrimiento. Y, actualmente, con la facilidad de los medios de comunicación, el caos y el desorden parecen aparentemente todavía mayores porque cualquier acontecimiento catastrófico que suceda en el planeta, por pequeño que sea, pasa de una manera inmediata a los titulares de los periódicos, radio, televisión e internet.
 
Cómo elegimos responder a las realidades difíciles que nos rodean es crucial. Sin embargo, no todos tenemos la capacidad o la oportunidad de influir sobre los grandes problemas mundiales, pero podemos comenzar barriendo la puerta de nuestra casa. Ante el caos del mundo, nuestra mayor y mejor contribución para ayudar a resolver los conflictos es despertarnos, crecer psíquica o espiritualmente. Romper los condicionamientos disfuncionales, las malas conductas, sacar la basura que hemos estado acumulando en nuestra casa a lo largo de los años, a veces sin darnos cuenta, y ser conscientes de que no hay acción pequeña: muchos granos de arena forman una playa. Dejar de hacer algo bueno por ser una acción pequeña es una gran equivocación.      

Frecuentemente, invadimos las fronteras de las personas con las que convivimos, entramos sin consideración en su intimidad con observaciones, palabras, actos, que los lastiman e hieren rompiendo la sintonía con ellos.

domingo, 28 de julio de 2019

Folleto 179

Fronteras emocionales (I)



Nos encontramos fronteras por todas partes, es algo inherente a la existencia, desde la materia inerte al ser vivo. Los seres vivos en especial, sin fronteras no podríamos vivir, el medio externo hostil nos invadiría. La primera frontera en el cuerpo es la piel, nos protege y nos aísla, pero al mismo tiempo necesitamos estar abiertos al exterior para tomar elementos de supervivencia que  son indispensables. Sin boca, nariz, oído, etc., estaríamos completamente aislados y condenados a la extinción.

Las fronteras implican discriminación y selección. No todo alimento es bueno, no todo el aire es sano. A esa selección primaria se une el sistema inmunológico que nos defiende de las miríadas de invasores que atraviesan las fronteras primarias.

sábado, 20 de julio de 2019

Folleto 178

Embolsar al enemigo





"Las cosas no salen como yo quiero.
¿Puede usted intentar algo para cambiarlas?
No. Se escapan completamente a mi control.
No sé qué hacer." 


Una técnica clásica de la guerra es intentar rodear al enemigo, embolsarlo, y posteriormente atacarlo por todas partes. Se ha intentado el mismo ejercicio con las células cancerosas: rodearlas con una materia que ellas no puedan atravesar, aislarlas y cortarles los suministros para que mueran por falta de alimentación.

Con los problemas que nos rodean podemos utilizar la misma técnica.

Embolse el problema: Visualizarlo encerrado en una bolsa, en un pequeño paquete y rodeado por sus caracteristicas personales muchos más fuertes. Encapsularlo y enmarcarlo rodeado completamente por todos los aspectos positivos que tenemos: la existencia, la vida, la capacidad de pensar, la riqueza de la cultura en sus múltiples aspectos que incluye para algunas personas la religiosidad. Somos las criaturas más evolucionadas de toda la existencia que nos rodea, somos los más desarrollados en la cadena del ser (materia, vida, pensamiento, cultura) somos el culmen de todo el sistema vivo que conocemos actualmente. Usted es la joya del universo y posee la capacidad de rodear los inconvenientes con la atmósfera de lo bello, agradable y los recuerdos buenos.

Una vez embolsado el problema, disminúyalo mentalmente en tamaño, fuerza, temporalidad.  Divídalo en partes más pequeñas.

martes, 16 de julio de 2019

Folleto 177

Desencadenantes emocionales y el investigador curioso



El conocernos lo mejor posible, una asignatura indispensable para nuestro bienestar, pasa por interrogarnos sobre qué circunstancias consiguen alterarnos, sacarnos de nuestras casillas, ponernos de mal humor. Qué compañías, lugares, momentos nos estropean el día. Para algunas personas puede ser darse un golpe contra la esquina de una mesa, para otro el sentirse insultado por alguien cercano, quizás no poder comprarse un objeto cualquiera por no tener dinero... Es importante que conozcamos cuales son los motivos más frecuentes que disparan nuestras emociones desagradables, de enfado, mal humor, amargamiento y otras parecidas. Nuestro objetivo es controlar nuestras respuestas, controlar nuestras actitudes, para lo cual es muy importante estar preparado ante las posibles trampas que nos acechen.

Una vez que conozca los probables escenarios que me descolocan, me enfurecen, estoy un poco más preparado para hacerles frente. Veamos una técnica que a muchas personas les puede ayudar una vez conocidos nuestros puntos débiles.

martes, 9 de julio de 2019

Folleto 176

La cultura infantil nos invade 



Hace algunos años, la memoria ya empieza a fallarme, los niños llevaban pantalón corto; cuando se hacía mayores y usaban pantalón largo se suponía que habían dejado atrás la infancia, el chupete y distintos artilugios parecidos: comenzaban otra etapa de la vida, entraban en el mundo de los mayores. Actualmente vemos por todas partes a adultos con pantalones cortos, de todas las formas y colores; tradicionalmente las únicas personas mayores que tenían la valentía de vestirse con esas prendas eran los ingleses que vivían en las colonias calurosas, pantalones cortos que adornaban además con calcetines estirados al máximo: un espectáculo grotesco... pero que ellos, sin miedo al ridículo, seguían repitiendo... En las películas también usaban  pantalones cortos los exploradores y cazadores de pobres elefantes africanos o inocentes ciervos como Bambi.

viernes, 21 de junio de 2019

Folleto 175

Resentimiento: un veneno para el alma y el cuerpo



"El resentimiento es un sentimiento persistente de disgusto o enfado hacia alguien por considerarlo causante de cierta ofensa o daño sufrido y que se manifiesta en palabras o actos hostiles."

El resentimiento es el sentimiento que nos embarga por la percepción de que estamos siendo tratados injustamente, que no obtenemos el debido respeto, aprecio, afecto, ayuda, disculpa, consideración, elogio o recompensa que merecemos. Este sentimiento nos mantiene prisionero en una sensación en el que es muy difícil apreciar o conectarse positivamente con una persona en particular o el mundo en general.

Las preguntas más frecuentes que se hacen las personas con resentimiento suelen ser:
“¿No tengo razón en estar enfadado? ¿No está justificado mi resentimiento y mi mal humor?”

Quizás desde un punto de vista independiente y objetivo, usted tiene razón y está plenamente justificado su resentimiento e ira, usted ha sido tratado de una manera injusta, pero esa es la pregunta equivocada, la pregunta que debería hacerse es:

¿Quiero estar resentido?

sábado, 13 de abril de 2019

Folleto 174

Semana Santa



Solo hay un objetivo que merezca la pena: desarrollar el mundo de la consciencia, la integridad personal.  No hay ningún otro problema importante porque resolviendo este, todos los demás se solucionarán. Todas las dificultades tienen un buen desenlace desde la consciencia y por lo tanto, ningún sacrificio es demasiado grande si se asegura la integridad personal. Lo que llamamos en lenguaje coloquial mantener el alma intacta. Merece la pena sacrificar lo que nos estorbe para conseguir ese objetivo, ya sea el ojo derecho o amputarse una mano, para no perder la claridad de vivir en la consciencia.Y no hay nada tan triste como contemplar una consciencia amputada, como explicaba Al Pacino en su formidable discurso de “Esencia de mujer”. https://www.youtube.com/watch?v=ADYLug1PiQw
No hay nada tan deprimente como ver desmoronarse los principios que forjan un carácter.

En estos días se celebra la semana mayor de la cristiandad y es un buen momento para recordarnos el mensaje, la actitud fundamental de Jesús de Nazaret.

lunes, 1 de abril de 2019

Folleto 173

¿Cuándo sentirnos ofendidos?



¿Qué es el sentimiento de sentirse ofendido?

El sentimiento de sentirse ofendido es un mecanismo de defensa que nos avisa si a nuestro alrededor hay uno o varios depredadores que nos atacan, que intentan aprovecharse de nosotros; cuando este sentimiento es sano, es un ayudante importantísimo para nuestra supervivencia pues nos coloca en estado de alerta para la defensa, el ataque o la huida.

martes, 12 de marzo de 2019

Folleto 172

Regresión



Entendemos regresión como un paso hacia atrás.

Los seres humanos sometidos a condiciones extremas de supervivencia generalmente experimentan una regresión a comportamientos  primitivos e inhumanos de etapas anteriores, y la vida basada en valores humanistas, sociales, deja de tener sentido. Los valores de rango superior que con tanto esfuerzo se han conquistado,  solidaridad, cooperación, tolerancia a lo que es diferente, se esfuman; damos un paso hacia atrás y sobresalen los individuos que presentan una conducta físicamente más fuerte, perdiéndose toda empatía por el prójimo. El individualismo egoista al máximo, se hace norte de la conducta.

La tesis (solo vale lo individual) y la antítesis (solo vale lo público), desembocan tras muchas dificultados en una síntesis, (integración entre lo individual y lo público) , un sistema nuevo con características de los dos bandos, sin embargo en la regresión hay un un paso hacia atrás a lo meramente individual o totalmente colectivo.

domingo, 24 de febrero de 2019

Folleto 171

Autosabotaje



Parece que hay veces en que nosotros mismos nos encargamos de estropear los buenos momentos que estamos saboreando. Es una especie de autosabotaje donde nos autolesionamos para no disfrutar tanto de una experiencia agradable. Nos trasladamos consciente o inconscientemente a una situación más incómoda ¿Cómo es ésto posible?

domingo, 17 de febrero de 2019

Folleto 170

El robot y la persona



“Si te puedes sentar tranquilamente después de escuchar malas noticias… 
Si en los tiempos de dificultades financieras eres capaz de permanecer en perfecta calma… 
Si puedes aceptar incondicionalmente a todo el mundo y contemplar los viajes de tus vecinos a lugares maravillosos sin el menor rastro de envidia… 
Si puedes comer sonriendo cualquier tipo de alimento que te presenten… 
Si puedes dormirte después de un día ajetreado sin un sorbo de alcohol o una pastilla… 
Si puedes encontrar contento en cualquier sitio en que estés… Probablemente… Eres un robot.”

Esta frase humorística de Jack Kornfield nos señala lo que significa, en parte, ser una persona humana. Un ser que siente. El dolor físico es inevitable, las medicinas alivian el dolor cada vez mejor, pero mientras estemos constituidos por nervios, carne y huesos, el dolor físico es inevitable. Un día nos dolerán las muelas, otro la cabeza o el estómago… Igualmente, las emociones son inevitables: sentiremos ira, tristeza, miedo en distintas formas, celos, etc. El intentar no sentir física o psíquicamente solamente lo consiguen las piedras. Los humanos (y los animales), sentimos, padecemos, lo pasamos bien y mal; esto es ser una persona.

sábado, 2 de febrero de 2019

Folleto 169

Maduración



Tengo una gran admiración por un gran comunicador actual que es Emilio Carrillo. Me ha enseñado multitud de conceptos y aunque no esté totalmente de acuerdo con todas sus ideas, puedo suscribir lo que él defiende casi en su totalidad. Recomiendo escuchar  sus conferencias en youtube porque son vitalizantes.

Siguiendo a la filosofía perenne, la maduración de la persona se sustenta sobre varios pilares de los que son muy importantes:

1. Tener fe en la vida. Fe en que podemos encontrar sentido en nuestra existencia. La fe origina confianza en la vida, en lo que nos sucede, es decir, tenemos la capacidad de ver en cualquier situación, y a pesar de lo incómoda que pueda aparentarse, un aspecto positivo. Tenemos la capacidad de convertirnos en magos y transformar la paja en oro. A aquel que tiene un "para qué", no le amedrantan las apariencias ni las circunstancias adversas. Una buena lectura es "El hombre en  busca de sentido" de Viktor Frankl, psiquiatra austríaco que sobrevivió a los campos de concentración de Auschwitz y Dachau.

sábado, 19 de enero de 2019

Folleto 168

Esperanza (II)



La esperanza es la virtud que nos muestra que a pesar de todo el sufrimiento que nos rodea hay sitio en nuestra existencia para la alegría, que la vida tiene sentido.  La esperanza nos asegura que todavía estamos a tiempo... Nada es inevitable.  Después de estas circunstancias adversas, hay vida. La esperanza deja fuera de combate a los nihilistas que pretenden desesperanzarnos a todos.

jueves, 10 de enero de 2019

Folleto 167

Virus invernales. Desesperanza (I)



Enero es un mes frio, con muchas posibilidades de gripes, resfriados y otras enfermedades parecidas.

Algunas personas se vacunan para evitarlas pero existen otros virus de los que es más difícil escaparse porque la infección está soterrada en nosotros y es crónica. Es nuestra manera de pensar, nuestras convicciones profundas de las que apenas conocemos nada y que sin embargo nos están haciendo comportarnos de una manera que nos ocasionan sufrimiento e infelicidad; son creencias disfuncionales, contraproducentes, que nos han inculcado, contagiado, y que desgraciadamente forman algunos de los cimientos de nuestra personalidad y nos llevan a sentimientos autodestructivos.

Uno de los peores virus que nos acechan en esta época de invierno es la desesperanza.