lunes, 9 de febrero de 2015

Folleto 77

¿Mereces la pena como pareja?

La prueba del algodón.


La pequeña de 20 meses estaba incordiando en una esquina mientras la madre charlaba con unas amigas y tomaba café.  Hacía muecas, lloraba un poco, miraba a la madre… Una amiga le comentó: “Desde hace un rato tu bebé está haciendo lo posible para llamar tu atención”.

“¿Por qué quiere que me fije en ella?” Preguntó inocentemente.

“No lo sé; solo sé que está hacienda lo imposible para que le prestes atención.  Te está probando para ver si es importante para ti.”

“¿Probándome?”

“Por supuesto.”

“¿Por qué?”

“Es lo que hacemos todos.”

La adolescente de 18 años se enfada con su madre, rompe a llorar, y se encierra en su habitación con un portazo. La madre da unos golpecitos en la puerta. Silencio. Le dice que lo siente y que quiere hablar con ella. Silencio. Al poco rato, pacientemente, suavemente, vuelve a llamar a la puerta. Finalmente, la hija abre y la deja entrar.

No es difícil pasar el test si sabes que te están probando. Lo que digas no es importante, lo importante es la actitud de querer pasar el test y demostrarlo. El tema del test siempre es el mismo: “¿Soy importante para ti? ¿Estás dispuesto a sacrificarte, incluso pasarlo mal, por mi causa? ¿Me quieres lo suficiente hasta el punto de hacer cosas incómodas por mí?”

Desde la prehistoria o desde antes, no digamos en la época de la caballería, las mujeres han sentido que es muy difícil resistirse a un noble caballero que esté dispuesto a sufrir y afrontar cualquier obstáculo por ellas. En cualquier novela romántica, el héroe, está ansioso de demostrarle a su amada que es capaz de afrontar cualquier dificultad, por tremenda que sea, para que ella se fije en él y caiga en la cuenta de su amor. Está deseando sufrir por su amada y demostrarle cuanto le gusta.

Hay que explicárselo frecuentemente a los pacientes: “Te están pasando un Test. Te están poniendo a prueba. Ella quiere saber si es lo suficientemente importante para ti para que te sacrifiques, superes el obstáculo  y así le demuestres tu amor.”

“¿Está seguro? En la universidad me preocupé, hice favores a una chica y le importó un comino, me mandó a freír espárragos…”

“Esto es diferente. Esa chica de la universidad no estaba interesada en usted, ésta si.”

“¿Cómo lo sabe”?

“Porque se está molestando en pasarle el test. Las mujeres si no están realmente interesadas en un hombre, no se molestan ni se preocupan por hacerlo. Considere esto como un cumplido y que se está preocupando por comprobar si usted merece la pena. Lo hacen incluso inconscientemente, sin darse cuenta; es un programa genético para evaluar si esa persona será una buen compañero en la vida.”

Los padres, maridos, amigos, deberían estar entrenados en esta situación; en que más pronto que tarde, le van a pasar la prueba del algodón, el test de si están realmente interesados en esa relación: le pondrán obstáculos para ver si los supera y está realmente motivados y dispuestos a hacer lo necesario para que la relación perdure a través de los cientos de inconvenientes y obstáculos que se presentarán en su vida como pareja.

Tienen razón los evangelios cuando afirman que “nadie muestra más cariño que el que da la vida por su amigo”  Es un buen test del algodón para cuantificar cuanto le interesamos a alguien y si será un buen compañero en “la salud y en la enfermedad, en la riqueza y en la pobreza, en los tiempos buenos y en los tiempos malos”. Así que no se  preocupe, le están haciendo un cumplido, le está mirando y evaluando, está interesada en usted.

NOTA: Ideas tomadas de Stephen Snyder, M.D. in SexualityToday. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario