Pensamientos negativos (III)
Durante siglos, hemos creído que nuestra visión de la realidad era igual que el mecanismo de un espejo: reflejaba exactamente lo que había a nuestro alrededor; éramos como una cámara de video, como una máquina de fotografías. Captamos exactamente lo que existe ahí fuera. Hoy sabemos que no es así. Las moscas ven con ojos de mosca. Los burros ven con ojos de burro. Vemos, en gran parte, como somos. (Dibuje una montaña y dos árboles a distinta altura: desde cada uno hay una visión distinta del paisaje). Los pobres ven un bollo de pan más grande que los ricos; y con las monedas ocurre exactamente igual. Un euro es más grande para un niño pobre que para un niño rico. Vemos según el paradigma en que estamos situados, por esa causa la comunicación y la sintonía entre las personas es tan difícil, cada uno contempla la realidad de manera diferente. Otra discusión es qué visión es mejor.