lunes, 18 de diciembre de 2017

Folleto 140

Navidad y soledad



Según las estadísticas, el sentimiento de soledad continúa creciendo en la sociedad occidental, sobre todo en tiempo de vacaciones y sobre todo en Navidad. La época de Navidad suele ser unas vacaciones muy estresantes: existe una gran presión social alimentada desde todas partes para la búsqueda de regalos, envolverlos, cocina especial, decorar la casa y prepararla para las visitas, limpiando antes y después… Pero el mayor obstáculo para el bienestar es la soledad. Somos seres sociales y el no tener lazos con otras personas es posiblemente el número uno de nuestras dificultades en la vida. La carencia del soporte emocional que ofrecen la familia y amigos puede conducir a la depresión, falta de autoestima y aumenta el riesgo de suicidio.

El sentimiento de soledad se puede definir como el malestar que origina la desviación negativa entre las relaciones sociales que le gustaría tener y las que realmente tiene. Carencia de conexión con las personas o sentimiento de incomodidad ante ellas, de no sentirse tan bien como uno desearía cuando se está rodeado de gente. Y no tiene nada que ver con el número de conocidos, sino con el sentirse desconectado de los demás.

martes, 12 de diciembre de 2017

Folleto 139

Negatividad en Navidad



En esta época del año es posible que caigamos fácilmente en la trampa de la negatividad. Ya sea comparándonos desfavorablemente con años anteriores, echando de menos a otras personas  o con que en general, nuestras expectativas de felicidad alimentada por tantos estímulos a nuestro alrededor, no se cumplen.

Nuestro cerebro está programado por miles de años de evolución a focalizar la atención más fácilmente en lo negativo que en lo positivo, es un mecanismo de defensa y de supervivencia muy potente, y ha costado mucho tiempo de investigación llegar al conocimiento que esa negatividad incrementa el estrés y el malestar.

domingo, 3 de diciembre de 2017

Folleto 138

Cuando la reconciliación es imposible



Se acerca el tiempo de Navidad, época en que las reuniones con la familia y amigos se suceden frecuentemente. Todo nos llama a la fraternidad y a las buenas relaciones, pero ¿qué podemos hacer cuando la reconciliación con “esa” persona especial con la que no nos llevamos bien es muy difícil o mejor dicho, es imposible?

Esa persona que es realmente tóxica, que no desea cambiar de conducta hacia nosotros, que no quiere hacerse cargo de ninguna responsabilidad, que intenta siempre manipularnos o abusar de nosotros; esa persona que cada vez que estamos junto a él nos recuerda malos momentos, nos hace sentirnos inseguros e intenta dañarnos una y otra vez.

¿Qué puedo hacer cuando los varios esfuerzos para sanar la relación han fracasado y conozco por experiencia que la reparación y reconciliación no llegarán a ningún buen fin por más que lo intente?