sábado, 28 de octubre de 2017

Folleto 134

Independencia de Cataluña

 

El Parlamento catalán ha declarado la República Catalana, un nuevo estado independiente del resto de España, han formalizado su separación del Estado Español. Las similitudes con un divorcio son evidentes y las causas son muy parecidas. Hagamos algunos paralelismos.

Un divorcio es algo devastador, desgarrador, angustioso:

a. Monetariamente, con alta probabilidad, sus ingresos van a disminuir drásticamente, al menos temporalmente. Se aproxima un tsunami, una fuerte tormenta económica

b. Emocionalmente es como la amputación de un miembro; uno sobrevive, pero es una persona amputada. Y si tiene hijos jóvenes, el problema se acrecentará. (los ciudadanos que no quieren la separación).

c. En el futuro próximo se llevará gran cantidad de tiempo y energía para reponerse

d. La persona que toma la iniciativa y comienza los trámites del divorcio (Cataluña), piensa que la situación para ella es insostenible y que no puede aguantar más en la familia. Prefiere pasar todos los inconvenientes posibles antes que vivir más tiempo en ese infierno con su pareja. No quiere arreglar la situación. No quiere negociar bajo aspectos racionales sino bajo sus imposiciones emocionales.

e. El separando cae en la ilusión que cambiando de pareja se arreglarán todos los problemas existenciales de su vida. (Se exceptúan los problemas de fuerza mayor: convivir con un asesino, etc. Espejismo del cambio de violín: Cambiando de violín tocaré el instrumento)

El problema fundamental es la “dinámica descompensada de la relación”:

martes, 24 de octubre de 2017

Folleto 133

Mentiras piadosas



La guardia romana buscaba a cristianos por desacato a la Ley Imperial y perseguía de cerca a un grupo que escapaba entre las callejas del barrio. Los perdieron de vista y le preguntaron a un ciudadano si los había visto pasar por allí, sin saber que esta persona era también cristiana. El hombre, acariciándose disimuladamente el brazo, contestó: “Por aquí no ha pasado nadie”. ¿Mentía?

El 8ª Mandamiento cristiano manda “No dirás falso testimonio ni mentiras”. Igual en el mundo judío.

En el Noble Sendero de las Ocho Ramas Budista, la 3ª norma es: “Recta palabra, no mentir”.

En el Corán también se castiga la mentira. Igualmente en todas las religiones se sigue esta norma: el mentir está mal.

Hace poco estuve en una boda y una amiga me preguntó si el sombrero que llevaba le quedaba bien y era elegante. Yo conocía su peregrinación por distintas tiendas buscando un sombrero apropiado para la ceremonia y que finalmente el que había elegido, para mi gusto, le sentaba muy mal y no estaba conjuntado con el traje que llevaba puesto. Sin dudarlo le contesté: “Es precioso y te cae muy bien”. ¿Estaba mintiendo?

lunes, 9 de octubre de 2017

Folleto 132

Excusas



¿Qué es una excusa? Es un pretexto para escaparse, eludir o evitar una conducta a la que una persona se comprometió y que se le exige, pero no desea realizarla.

No obstante, debe diferenciarse si la excusa es pre-compromiso o post-compromiso. También debe diferenciarse según la cercanía de la persona que pide cumplir el compromiso o de la materia que se trata. Dependiendo de los factores anteriores, esa escapatoria tendrá un carácter más o menos peyorativo y se nos mirará mejor o peor, como a alguien antisocial o como a una rata cobarde y asquerosa.

Como afirma un conocido libro: “Cómo decir NO y no sentirme culpable”, tenemos derecho a decir NO sin sentirnos mal ante cualquier demanda que se nos haga y no deseemos satisfacer; el problema es que somos seres sociales, tenemos que cuidar las relaciones con otras personas y, al mismo tiempo, no tenemos por qué hacer aquello que no queremos. Un difícil equilibrio.

También hay que destacar que, si se ha comprometido con su palabra o firma a una determinada actividad o contrato, la excusa no exime de lo pactado excepto por causa de fuerza mayor (escasísimas ocasiones): terremoto, muerte, tsunami, etc.
Siempre que se ha dado la palabra, hay que cumplir: las acciones siempre tienen consecuencias.
La próxima vez, antes de dar su palabra, piense un poco mejor a qué se compromete y tenga presente que usted es una persona seria y responsable de sus actos.
Las deudas de juego hay que pagarlas. Si no le gusta, la próxima vez no juegue.

Vamos a examinar un poco más de cerca el problema:

domingo, 1 de octubre de 2017

Folleto 131

Entrar en la zona blanca



Escribíamos en el folleto anterior que todos anhelamos llegar a la zona blanca,  al Reino de Dios, al Reino de los Cielos; al lugar donde los ciegos pueden curarse y ver, los mudos hablar, los sordos pueden oír, los paralíticos andar, los sucios son limpiados, los muertos resucitan, los hambrientos y sedientos son saciados; como describe Pagola.

¿Qué debo hacer para entrar en la Zona Blanca?